Deslumbra tus ojos con estos 3 trucos de maquillaje

A la hora de maquillar los ojos cuando llevas gafas, hay que tener en cuenta algunos trucos que pueden hacernos estar más favorecidas.

A la hora de maquillar unos ojos que se esconden tras una montura de gafas, hay que tener en cuenta algunos trucos que pueden hacernos estar más favorecidas y guapas sin perder nuestro estilo personal.

Es importante elegir una montura que se adapte a nuestras facciones, que juegue con las líneas y los volúmenes de nuestro rostro para corregir la forma del óvalo. En función de la montura (muy delgada, muy gruesa, al aire, llamativa…), elegiremos nuestro maquillaje. Por ejemplo, si la montura es muy llamativa, no cargues excesivamente los ojos; puedes optar por unos ojos suaves y dar protagonismo a tus labios.

Antes de elegir el tipo de maquillaje, hay que tener en cuenta la prescripción del oftalmólogo y la graduación que llevamos. Esto es importante porque, en función de si tenemos hipermetropía o miopía, la graduación puede cambiar ópticamente el tamaño del ojo.

Antes de elegir el maquillaje, debes tener en cuenta:

  • Si tienes hipermetropía, los ojos se verán más grandes y, por tanto, el objetivo será maquillarlos para que parezcan más pequeños. Huye de las sombras claras, muy brillantes y luminosas. Los maquillajes que más favorecen son, en general, los ahumados. El delineado superior e inferior en un tono oscuro te sentará bien y, si rompes la línea difuminándolo, te quedará genial.
  • Si, por el contrario, tus gafas corrigen la miopía, los ojos se verán más pequeños y deberás intentar agrandarlos visualmente. Opta por tonos luminosos y delinea tus pestañas superiores en un tono oscuro. Con ese mismo tono oscuro, delinea las pestañas inferiores y rompe la línea difuminando el lápiz. Por último, con un tono clarito, marca tu línea de agua inferior.
  • Si tienes astigmatismo, no vas a tener problema al elegir tu maquillaje de ojos, ya que este tipo de cristales no altera significativamente el tamaño de los ojos.

 

No lo dudes, opta por delineadores cremosos y suaves que hayan pasado todos los controles oftalmológicos y dermatológicos y que sean hipoalergénicos. Si tus ojos son sensibles, con mayor razón.

Tanto si tienes hipermetropía como si tienes miopía, el uso del corrector en la zona de la ojera es básico. Mantener libre de oscuridad el contorno del ojo hará que tus ojos se vean descansados y evitará sombras indeseables bajo tus cristales. No dudes en tener siempre a mano un corrector, especialmente si a la vez aporta nutrición a la zona del contorno de los ojos, como hace el Corrector Invisible Belcils con aceite de ricino.

Mantener a raya tus cejas también es especialmente importante si llevas gafas. Así que hazte un buen diseño, rellena las calvitas si las tienes y utiliza un lápiz para cejas que no sea excesivamente cremoso, para que se mantenga intacto todo el día.