Incluyendo estas pautas al día a día la apariencia de las bolsas va a mejorar

De la todas las preocupaciones estéticas -en cuanto al ojo se refiere- las más frecuentes son las ojeras y las bolsas. Con razón, ya que la piel del contorno del ojo es la más frágil y susceptible de toda la superficie cutánea del cuerpo. El espesor medio de la dermis del  contorno del ojo es cuatro veces más fina que la del resto del rostro, que a su vez, es cinco veces más fina que la del cuerpo. La piel del ojo son escasos 0,004 milímetros, además tiene una menor cantidad de fibras de colágeno, elastina y glándulas sebáceas. Si añadimos a la fórmula que los músculos periorbitales están en continuo movimiento, no es de extrañar que sea una piel que se distienda con facilidad.

Aunque hay personas más predispuestas que otras genéticamente a tener bolsas debajo de los ojos,  por lo general son más perceptibles por la mañana al levantarse, especialmente si no se ha dormido bien, dado que es el momento en el que la retención de líquidos es mayor.

 

Cinco soluciones para disminuir las bolsas de los ojos

1Frío, frío, frío: el frío contribuye a reducir la congestión de los ojos. Puedes envolver un hielo con un pañuelo de tela y apoyarlo en los ojos durante unos minutos, así las bajas temperaturas reducirán la inflamación, o bien usar antifaces creados con este fin, que se guardan en la nevera. Otro truco muy interesante, sobre todo en los meses de mucho calor es mantener tu crema de contorno de ojos en la nevera, así en el momento de usarla por la mañana estará fresca y las bolsas controladas.

2Drenantes al poder: hay una gran variedad de plantas que llevan siglos demostrando su utilidad como drenantes, astringentes y descongestivasSe utilizan extractos de plantas suavemente astringentes que facilitan la circulación y tienen acción descongestiva y antiinflamatoria. Mejoran la oxigenación y ayudan a drenar los líquidos retenidos y, por tanto, a reducir las bolsas. Aplicar con un suave masaje en la zona del contorno del ojo una crema que lleve en su formulación aciano, fresno, hamamelis, hiedra, manzanilla, té verde, pepino o cafeína, entre otros, será como un regalo para tus ojos.

3Frutas, verduras y agua: no nos cansaremos de decirlo, cuídate desde el interior, los alimentos son tu mejor fuente de minerales y vitaminas. Beber al menos dos litros de agua al día y comer cinco raciones de frutas y verduras es el mejor cuidado que puedes dar a tu piel. El agua y la fibra descongestionan y drenan. Puedes decantarte por las frutas y verduras que además de hidratar, ayudan a drenar los líquidos retenidos y así reducir las bolsas y la hinchazón: melón, sandía, apio o espárragos.

4La postura en la cama: es una cuestión de gravedad, dormir boca arriba y con la cabeza un poco más elevada que los pies y utilizar una almohada más gruesa contribuye a que se hinchen menos los párpados durante la noche y, por tanto, retrasa la aparición de las bolsas. Igual de importante es procurar tener al menos siete horas de sueño por las noches.

5Evita los malos hábitos: el alcohol y el exceso de sal también perjudican al estado de la bolsas. Son los elementos de la dieta que más agua retienen, querrás evitarlos a toda costa si no deseas que aparezcan las bolsas debajo de los ojos.